En realidad esta expresión es una llamémosle ironía, por no llamarle un verdadero reproche, a todos aquellos que carecen de sentido de la autocrítica.
Reconozcamos humildemente que son muy pocos los que echan mano de la inteligencia y sin embargo muchos solo de la soberbia para valorar sus actos. Y sin embargo es algo tan importante para realizar los juicios de nuestras acciones, que sin aquella siempre serán falsos.
¡La soberbia! sin duda el peor, pero el más extendido pecado humano.
¿Culpable yo?…eso jamás. Busquemos, busquemos siempre culpables
Serían docenas o posiblemente cientos los ejemplos históricos que podría poneros de ello. Hasta aburrido sería. Pero verdaderamente, ¿para qué hemos de acudir a lejanos tiempos…? No, no hace falta. Acudamos a algo tan cercano como lo ocurrido no más lejos que la semana pasada.
Si te acompaña alguien que ha dicho en un Congreso: Que se marchen los liberales y los conservadores de este Partido…. Pues naturalmente se han marchado, los primeros a Ciudadanos y los segundos a Vox.
Si además, es alguien con suciedad suficiente, hasta proyectada en una pared, al que le dice el Jefe de la Oposición: Si usted dimite y convoca elecciones, retiro la Moción de Censura. Y él contesta que no, porque piensa que no la va a ganar. Teniendo en cuenta que ya había prometido que nunca habría en Cataluña un Referéndum, y hubo dos por su indolencia, pues natural y muy natural es lo ocurrido.
Reconociendo que es usted con seguridad, Sr Casado, el mejor político actual de España, no busque culpables, por favor, y ponga de verdad en marcha un Partido en el que estemos representados todos, los que creemos en una España unida, es decir todas las personas de bien, que somos once millones largos de votantes, y termine usted de una vez por todas, con los perversos “Sorayismos” que han demostrado no ser buenos ni para unos, ni para los otros.
¿Habrá que votar más con la cabeza que con el corazón?